FOTOGALERÍA | Alfombras y altares para celebrar el Corpus en la comarca

Una gran alfombra decoraba la parroquia de Verín. | FOTOS: Parroquia de Verín.
Voluntarias preparando las alfombras en las calles de Verín.
Un altar esperaba a los devotos en la unión de las calles Mariano Carrero y Amaro Refojo.
También los Mercedarios participaron en el Corpus.
La elaboración de alfombras en Verín duró hasta la madrugada.
Numerosas banderas de España decoraron el paso de la procesión.
Corpus Christi en Oímbra. | FOTOS: Cedidas.
No podía faltar el pimiento de Oímbra.
Varios altares decoraron las calles de Oímbra.
La alcaldesa Ana Villarino no faltó a la cita religiosa.
En Oímbra no quedó ni un rincón sin decorar.
La gran tradición que existe en Oímbra tiñó todas sus calles de color.
Corpus Christi en Vilardevós. | FOTOS: Cedidas.
Creando la alfombra que decoró la plaza del Crucero de Vilardevós.
En Laza también se prepraron alfombras para celebrar el Corpus Christi. | FOTO: Cedida.

Un año más, la celebración del Corpus Christi tiñó las calles de color en diferentes puntos de la comarca. Verín, Oímbra, Vilardevós y Laza son un claro ejemplo de la devoción que se mantiene. Las alfombras ya no son tan florales, ahora se utiliza tierra, serrín o sal con algunos elementos vegetales.

La parroquia de Verín sorprendía con una gran alfombra que ocupaba casi todo su atrio esperando el paso de procesión que salía desde la iglesia para recorrer las calles Mayor, de la Cruz y Amaro Refojo. A su paso, alfombras con diversos motivos y numerosas banderas de España decorando los balcones. Un altar esperaba a los devotos para la celebración, mientras los Mercedarios esperaban con su virgen en la esquina de la calle de la Merced.

En Oímbra la tradición del Corpus es tal que todas sus calles fueron decoradas, no quedó un rincón sin adornar. Incluso su conocido pimiento estaba presente en las alfombras; por cierto, muy elaboradas.

También en Vilardevós se trabajó para preparar las alfombras del Corpus. La tulla fue protagonista de las enormes alfombras que decoraban sus plazas.

Y, cómo no, Laza mantuvo la tradición de las alfombras del Corpus.